lunes, 24 de enero de 2011

ASTURIAS - EL FUTURO DE LA LEY NO ESTÁ ASEGURADO SI GOBIERNA LA DERECHA

«El futuro de la ley de Dependencia no está asegurado si gobierna la derecha»

«Las residencias privadas deberán explicar por qué, con 1.800 personas en Asturias esperando por una plaza pública, no quieren concertar las suyas»


NOEMÍ MARTÍN Consejera de Bienestar Social y Vivienda

Unos 15.000 asturianos son dependientes, reciben ayudas económicas o se benefician de servicios que hasta hace cuatro años tenían que pagar íntegramente.

A finales de este año, la consejera de Bienestar Social y Vivienda del Principado, Noemí Martín, cuenta con que sean unas 23.000, pero eso está por ver. Por medio hay unas elecciones y Martín teme que si la derecha gana terreno la ley de Dependencia sea sacrificada.

-El Observatorio de la Dependencia suspende a Asturias.


-Un suspenso totalmente injusto. Yo no me daré por satisfecha mientras haya una sola familia que tenga que esperar un año para recibir una ayuda, pero es que los datos que maneja el Observatorio son erróneos. Por ejemplo, valoran las leyes de servicios sociales de tercera generación. Asturias tiene una ley de 2003 que hizo un Gobierno socialista con mayoría absoluta y que nosotros apoyamos porque era pionera. Otras comunidades la tomaron como modelo y está totalmente actualizada. Pues el Observatorio le da un cero a Asturias por haber sido aprobada antes de 2007. Y en cuanto a los datos que maneja, no están actualizados. Pero lo más injusto fue la expresión de que la ley estaba congelada, cuando en un año se incorporaron al sistema 5.800 personas.

-Se sugería que los servicios sociales municipales mejorarían la gestión del sistema.


-Hay modelos diferentes, comunidades que utilizan el sistema sanitario para valorar -Castilla-La Mancha, Cantabria...- en otras los servicios sociales municipales y otras similares a Asturias. El resultado no dista mucho. Los servicios municipales son la puerta de entrada en el sistema y tienen un papel de seguimiento fundamental. En el plan concertado de 2009 y 2010 el esfuerzo fundamental de financiación fue para reforzar los servicios municipales para la atención a la Dependencia. No niego la posibilidad de que se les dé un papel más protagonista pero no ahora.

-¿Qué nota se habría puesto usted?

-En torno a un siete. El dinero de los ciudadanos se está invirtiendo en crear una red pública de servicios, alojamientos, centros de día, ayuda a domicilio, teleasistencia... No podemos estar satisfechos al cien por cien, pero que el sistema de Dependencia en Asturias atienda a casi 15.000 personas merece una valoración positiva.

-¿Por qué no aprovechar los recursos privados que ya existen?


-Desde que estamos aquí salieron a concurso más de 1.400 plazas residenciales y se incrementó el precio público. Yo me hago una pregunta: tenemos 1.800 personas en lista de espera del ERA (Establecimientos Residenciales de Asturias) y hay residencias privadas que no quieren concertar; hay demanda, para la parte pública y la privada. Tendrán que explicar por qué siguen teniendo plazas libres con la demanda que existe.

-Con vistas a las próximas elecciones, ¿repetirá en las listas de IU? ¿aspira a continuar en la Consejería?


-Eso lo decidirá IU. Yo aspiro a consolidar un Gobierno de las fuerzas de la izquierda en Asturias. Hay en España, en toda Europa, una ola conservadora nefasta. En Asturias, frente a una derecha dividida, confío en que la izquierda tenga un peso importante, que tenga mayoría y que IU crezca.

-¿El futuro de la ley de Dependencia está asegurado con un Gobierno de derechas?


-No. Sólo hay que darse una vuelta por las comunidades gobernadas por la derecha o ver la referencia europea de Cameron. Si por algo se están caracterizando los conservadores, es por un recorte de derechos y del Estado del bienestar. La izquierda debe demostrar que hay otra alternativa, otra salida a la crisis.

-Pues tienen un nuevo oponente: Foro Asturias.

-Ahora el escenario político en Asturias está muy abierto, estamos ante una nueva situación. A mí lo que me interesa es que la derecha, por las políticas que defiende, no avance, y ojalá esa división signifique su retroceso en Asturias. Yo estoy convencida de que entre Francisco Álvarez-Cascos e Isabel Pérez-Espinosa no hay muchas diferencias.

Fuente : lne.es

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